FACHADAS REPUBLICANAS
En Timbío la única vivienda construida con fachada estilo arquitectura republicana es la casa del señor Luis Garzón, hijo del coronel Estanislao Garzón Héroe de la guerra de los 1.000 días. Data de 1.905.
La única cuadra que actualmente conserva con la fachada de arquitectura clásica entre colonial y republicana es la del extinto Bartolo Alegría.
CASA DE LA CULTURA
Esta edificación hace parte de la primera cuadra construida en la población, en tapia pisada con paredes de un metro de grosor toda la cuadra comparte la misma tapia exterior e interior y las divisiones, también en tapia aunque de diferentes propietarios. Su construcción data de 1.680.
La casa fue adquirida por el consejo municipal para albergar los grupos artísticas de danza, música, cerámica y artes plásticas durante la administración del señor Helder Hugo Dorado Arcos como director Ad. Honorem de la misma en el año 1.983 con el fin de aprovechar los espacios para la práctica de las diferentes artes. Se efectuaron una serie de modificaciones internas a la estructura inicial. Esta construcción en su primera parte se corresponde a la arquitectura clásica colonial de la vivienda solariega de ascendencia española.
Anexo a la edificación tradicional se construyo un auditorio y un taller para la cerámica, para estos utilizaron materiales más modernos.
COLEGIO SAN ANTONIO DE PADUA
Esta Institución Educativa se inicio como una escuela urbana para niñas en una construcción de bareque y techo pajizo en el espacio que actualmente ocupa la capilla de la misma institución con piso de tierra pisada y paredes de caña brava estructurada con barro y paja. Hacia el año 1700. El terreno para esta escuela pajiza fue cedido por la familia calderón, propietaria de la casa vecina. Su existencia se calcula en 80 años.
Hacia el año 1910 por iniciativa del consejo municipal se adquirió el terreno adjunto a la escuela pajiza y se inicio la construcción de lo que actualmente es el primer patio del colegio en inmediaciones al rio Chambio, que pasa por la parte sur de este terreno se construyo un galpón y horno para quemar el ladrillo con el cual se construía el edificio.
El diseño arquitectónico de el colegio se corresponde a el modelo español de un patio central con salones, habitaciones y servicios alrededor del mismo en dos plantas, con pialares de madera que sostienen toda la estructura de la segunda planta; con amplios corredores enrejados en madera. La fachada exterior con puerta ventanas en balcón, inicialmente con rejas de madera torneada que posteriormente fueron reemplazadas con hierro forjado. El portón principal en madera tallada. Las paredes de la primera planta construidas de la primera planta en tapia pisada con un grosor de un metro intercalando horizontalmente piedra y ladrillo en tramos. Los bordes exteriores de la tapia pisada recubierto de ladrillo en aplomo con cenefas salientes en ladrillo redondeado; la pega para el ladrillo preparada con arenilla, sangre de res y adherente en baba de “palo bobo”.
Los pisos inicialmente en ladrillo cuadrado o triangular. Los cielorrasos en caña brava tejidos en rejas y cordeles de pie de res y los techos cubiertos con teja española.
En la construcción de esta edificación duro casi 20 años. En 1934 se clausura la escuela urbana de niñas y el nuevo edificio fue ocupado por la congregación de hermanas franciscanas de María Inmaculada.
La comunidad franciscana durante su permanencia de mas d e60 años construyo con la ayuda de la comunidad y benefactores la capilla de María Inmaculada, esta ya con materiales más modernos. En el mismo sentido construyo el segundo patio, conservando el diseño arquitectónico clásico español de los claustros religiosos. Este edificio fue declarado patrimonio arquitectónica y cultural del municipio durante la rectoría del señor Helder Hugo Dorado Arcos.